Don Julio Grondona hizo un simulacro de presencia en la reunión, les comunicó la orden a acatar y salió más rápido que corriendo a comunicar oficialmente la novedad a sus superiores jerárquicos de la Casa Rosada. El Ministerio de la Pelota cumple; Fútbol para Todos dignifica. Ahora sólo resta esperar que Los Muchachos hagan buena letra porque aparece un muerto y se pudre todo.
Lo que resulta más significativo, aparte de vivirse una época de bonanzas electorales con un rotundo 50% aparentemente cliente del oficialismo, amén de que ayer mismo la primera mandataria dio a conocer las bonanzas con que cuenta el fútbol en los planes estratégicos de El Modelo, es que el Nuevo Campeonato está en barbecho y cuenta con un inusitado apoyo de los llamados periodistas deportivos. La perspectiva de que se abran conchabos a rolete no está para dejar pasarla de largo. Sobre todo en este nuevo veranito económico de San Juan donde todo puede venirse a la mierda en cualquier momento y andá cantarle a Gardel.
Las regalías, mimos y excepciones legales para River se completan en la semana cuando la instancia judicial correspondiente conteste al recurso de amparo presentado por los millonarios con respecto a la suspensión de su estadio. La FIFA tiene terminantemente prohibido a sus afiliados, so pena de desterrarlos, recurrir a la justicia ordinaria. El fútbol es un mundo aparte con un orden jurídico aparte. El Califa de Sarandí ha extorsionado a rolete con el asunto. Pero ahora se trata de River y River es River, no otra cosa.
El juego como excepcional formador de cultura, en cambio, es una regla democráticamente vigente. La indemnidad para los poderosos y amigos del patrón acaba de quedar de manifiesto al hacerse público la deuda en materia previsional que tiene la Fundación Madres de Plaza de Mayo, en los hechos una ONG que devino en corporación capitalista, y que la AFIP ha omitido hacer la denuncia correspondiente de un delito que como tal tiene severas penas de prisión. Además, la hiperfutbolización de la realidad de la que ya hemos hablado varias veces, del mismo modo que al espectador de fútbol el único universo vigente es el estadio y el partido, en la vida cívica, según sintetizó con cierta acritud el tambero que preside la Sociedad Rural, los valores vigentes son los de Tinelli y que se puedan pagar las cuotas del plasma. La moral estricta es un problema de los mormones. Como decía el viejo cura de pueblo, hijo, haz lo que yo digo, no lo que yo hago.
Ergo, neutrales o no, el fin de semana que viene todos a la chacán, che, a reventar gallineros, con perdón de los presentes y sin alusiones de ninguna especie, sino en referencia a las endebles y minúsculas instalaciones de que hacen gala los clubcitos del ascenso.
